Tabla de contenidos
¿Te imaginas evaluar a tus alumnos en segundos y de forma divertida, sin que necesiten ordenadores ni móviles? Bien, pues precisamente eso es justamente lo que ofrece Plickers, una de las herramientas digitales educativas más innovadora herramienta educativa que se está ganando el cariño de los docentes de todos los niveles.
Dicho esto, en esta entrada del Blog trataremos de explicar de forma más profunda qué es Plickers, cómo se utiliza en el aula y qué aporta a los docentes para mejorar la participación y la evaluación. Además, veremos ejemplos concretos en Educación Infantil, Primaria y Secundaria. ¡Vamos con ello!
¿Qué es Plickers?
Plickers es una aplicación gratuita de evaluación interactiva que permite a los docentes realizar preguntas tipo test en clase y obtener las respuestas de todos sus alumnos en tiempo real. Por ejemplo, a diferencia de otras herramientas de cuestionarios en línea, Plickers no requiere que cada estudiante tenga un dispositivo electrónico.
En su lugar, cada alumno responde usando una tarjeta Plickers (un código impreso único en papel) que el docente escanea con la cámara de su móvil o tableta. De este modo, el docente puede recopilar rápidamente las respuestas de toda la clase de forma rápida y lúdica.
¿Cómo se usa Plickers?
Plickers se usa de forma muy sencilla. Primero, el docente tiene que crear una cuenta gratuita y preparar sus preguntas de opción múltiple (A, B, C, D) o Verdadero/Falso. Puede hacerlo desde la página web o directamente en la Plickers app.
Después, genera o descarga el lote de tarjetas Plickers y las reparte a cada estudiante (cada tarjeta tiene un código único asociado a un alumno). Entonces, el docente formula la pregunta (por escrito en la pizarra, proyectada en pantalla o de forma oral) y pide a los alumnos que muestren la tarjeta con la respuesta que consideren correcta.
Cada alumno sostiene su tarjeta girada según la opción que elige. Finalmente, el docente utiliza la aplicación móvil de Plickers para escanear la sala. En pocos segundos la cámara reconoce todos los códigos y registra quién respondió A, B, C o D.
Además, esta herramienta almacena las respuestas para que el docente pueda consultar posteriormente un informe (Report) con el rendimiento de cada alumno.
¿Qué es la tarjeta Plickers?
La tarjeta Plickers es el elemento clave que permite a los alumnos responder sin dispositivos electrónicos. Pero, la tarjeta Plickers, ¿qué es exactamente? Bien, básicamente es un papel o cartulina con un código de respuesta único impreso en forma de figura geométrica tipo código QR.
Cada tarjeta tiene asignado un número de identificación (por ejemplo, Alumno 1, Alumno 2, etc.) y en sus cuatro bordes aparece una pequeña letra: A, B, C y D. Estas letras indican las cuatro posibles respuestas de una pregunta de opción múltiple.
¿Cómo se utilizan?
Su uso es muy sencillo. El estudiante simplemente sostiene su tarjeta de manera que la letra de su respuesta elegida quede en la parte superior. Por ejemplo, si la respuesta correcta le parece la opción B, levantará la tarjeta orientándola de modo que la B esté arriba.
Recordemos que la tarjeta Plickers es cuadrada y simétrica, de manera que la cámara del docente capta el código desde cualquier ángulo y reconoce qué letra se ha seleccionado según la orientación. Así pues, cada alumno tiene su propia tarjeta Plickers (numerada) para que el sistema sepa quién es quién al escanear.
¿Qué ventajas presentan las tarjetas Plickers?
Plickers representa algunas ventajas importantes. Por ejemplo, la primera que podemos apreciar es que las tarjetas Plickers se pueden obtener gratis. El docente puede descargar el set de tarjetas desde la web de Plickers e imprimirlas en papel o cartulina. En dicho set las tarjetas Plickers vienen numeradas (generalmente del 1 al 40, con posibilidad de ampliar hasta 63) para atender a la mayoría de tamaños de clase.
Además, se pueden plastificar o laminar para usarlas muchas veces a lo largo del curso sin que se estropeen.
Otra de las ventajas es que gracias a este sistema de tarjetas físicas, no hace falta conexión ni aparatos para los alumnos. Solo con su tarjeta en mano ya pueden participar en la actividad.
Por último, podemos decir que fomenta la participación de toda la clase al tratarse de puntuaciones «anónimas». Únicamente el docente sabrá cuál es el nivel de aprendizaje del alumnado. Por tanto, esto evita que se sientan juzgados y que, incluso los más tímidos, se sientan parte de la actividad y quieran participar.
¿Cómo usar la App para Plickers?
La App para Plickers es la aplicación móvil que acompaña al servicio y actúa como “mando” del docente durante la actividad. Está disponible de forma gratuita tanto para Android como para iOS. Ahora bien, ¿cómo funciona la app y qué ofrece a los docentes? Bien, a continuación veremos cómo funciona la App de Plickers:
Configuración inicial
Cuando la aplicación es descargada, se tiene que iniciar sesión con su cuenta de Plickers (la misma creada en la web). Desde la app, se pueden crear clases y preguntas, igual que en la web, o sincronizar las que ya se prepararon en el ordenador.
Por ejemplo, el docente puede tener previamente cargadas las listas de alumnos de cada grupo y los cuestionarios de cada tema.
Resultados instantáneos
De forma paralela, el docente puede conectar su cuenta de Plickers en un ordenador de clase para proyectar un gráfico en vivo. Este gráfico (generalmente barras o porcentajes por opción) se actualiza al instante conforme se escanean las respuestas, mostrando a todo el grupo un resumen de cuántos votaron A, B, C o D.
Entonces, puede discutir el resultado colectivamente: por ejemplo, “veo que el 80% respondió A y solo un 20% B, ¿por qué creéis que ha ocurrido esto…?”. Así, fomenta el debate y la participación en el aula.
Seguimiento y registros
Otra funcionalidad de la app (y de la plataforma en general) es el almacenamiento de datos. Cada respuesta queda guardada, vinculada al alumno y a la pregunta. De este modo, el docente puede acceder después a la sección de Reports (informes) para ver con detalle el rendimiento individual y grupal.
Es decir, podrá analizar quién acertó cada pregunta, en qué ítems hubo más fallos, etc. Por lo tanto, Plickers no solo sirve para el momento de la pregunta en clase, sino también para analizar el progreso y detectar patrones de comprensión a lo largo del tiempo.
¿Cómo se usa Plickers en las diferentes etapas?
Plickers en Educación Infantil (3-6 años)
En los primeros cursos, Plickers se convierte en un divertido juego visual. Por ejemplo, en una clase de 5 años, el maestro puede proyectar imágenes de animales y preguntar: “¿Cuál de estos es un mamífero?” con opciones A, B, C, D representadas por dibujos (A: pez, B: pájaro, C: perro, D: mariposa).
Los pequeñitos levantan su tarjeta Plickers orientándola hacia la letra de la respuesta que elijan. Además, los maestros de Infantil marcan las tarjetas con colores o símbolos asociados a cada letra (por ejemplo, un punto rojo junto a la A, azul junto a la B, etc.).
Plickers en Educación Primaria (6-12 años)
En Primaria, donde los alumnos ya leen y escriben, Plickers se usa habitualmente para repasar contenidos de forma interactiva.
Por ejemplo, un maestro de 4º de Primaria puede utilizar Plickers al final de la semana para repasar conceptos de matemáticas: formula 5 preguntas rápidas (como resultados de operaciones, problemas de lógica con opciones A-D, definiciones de geometría, etc.).
Cada alumno responde con su tarjeta y el docente escanea para ver en segundos quién comprendió el tema.
No obstante, también se puede emplear en materias de ciencias o lengua. Por ejemplo, imaginemos una clase de Ciencias Naturales donde después de explicar las partes de una planta, el maestro lanza una pregunta “¿Cuál es la función de las raíces?” con cuatro posibles respuestas. Todos los niños participan levantando su tarjeta con la opción elegida.
Plickers en Educación Secundaria y Bachillerato (12-18 años)
En los cursos de Secundaria, donde el currículo es más complejo, Plickers se convierte en un aliado para evaluar comprensión en tiempo real sin interrumpir demasiado la clase. Por ejemplo, un profesor de Historia en 2º de ESO puede iniciar la lección con un breve quiz de repaso sobre la materia anterior. Entonces, lanza 3 preguntas sobre la Revolución Francesa y en un minuto obtiene feedback de toda la clase sobre qué recuerdan y qué conceptos conviene reforzar.
Asimismo, en Secundaria se puede usar Plickers para fomentar debates: un profesor de Ética podría plantear una pregunta de opinión (“¿Crees que se debe… A: sí, B: no, C: depende…”) y tras escanear las respuestas anónimas, mostrar que, por ejemplo, un 60% está a favor y 40% en contra. A partir de ese resultado, se inicia un debate en que los alumnos argumentan sus posturas. Esto, por supuesto, habiendo comprobado antes de forma anónima la tendencia del grupo.
Pongamos ahora un caso de Bachillerato. Por ejemplo, en la clase de Química , tras explicar la tabla periódica, el profesor pregunta “¿Cuál de estos elementos tiene mayor electronegatividad?” A, B, C o D. Los estudiantes responden con Plickers, y si el porcentaje de error es alto, queda claro que hay que repasar o explicar de otro modo.
Conclusión
Con todo, podemos decir que Plickers es una herramienta muy válida y que, aunque no hagamos una evaluación oficial con ella, sí que nos da pistas como docentes de por dónde va nuestro alumnado. Es decir, si aprendió lo que tenía que aprender, si tiene dificultades de algún tipo, si algún concepto no quedó claro y hay que incidir en él, etc.